CASTILLO DE LOARRE

  A unos 35 Km. de Huesca, en la sierra de Loarre, encontramos el castillo del mismo nombre. Considerado como la fortaleza románica mejor conservada de Europa, utiliza como cimientos un promontorio de roca y desde su posición se puede observar toda la Hoya de Huesca. Ha servido de escenario para el rodaje de documentales y programas de TV, y es el lugar dónde se rodó la película "El reino de los cielos", cuyo protagonista entre otros fue Orlando Bloom. Construído en el S. XI por orden del rey Sancho III y con ampliaciones posteriores.
  Como todo castillo que se precie, también tiene su leyenda y por supuesto su fantasma. Paseando San Demetrio por la zona con su mula ciega, ésta dio un traspiés y cayó al suelo. Los dos murieron, pero antes de morir dijo: "nunca volverá a nacer planta de romero en el monte de Loarre". Y así ha sido porque podemos encontrar ésta planta por toda la zona excepto en el monte de Loarre.
  Las yeserías de los muros laterales de la capilla parroquial, describen el motivo de su construccion, contandonos que iban dos clérigos franceses atravesando el pirineo acompañados de una acémila cargada con la arqueta de las reliquias de San Demetrio. Cuando llegaron a Jaca, todas las campanas misteriosamente comenzaron a tocar, descubriendo la preciada carga que transportaban. Los jacetanos forcejearon con los franceses, para hacerse con el tesoro pero ante la negativa de éstos, decidieron sacar los ojos a la acémila y convinieron que las reliquias se quedarían en el lugar donde se detuviera el animal. Esta echó a andar y después de atravesar el valle del Rasal, cayó muerto frente al castillo de Loarre. Los clérigos franceses depositaron la arqueta relicaria en San Pedro del Castillo y los loarreses en memoria del acontecimietno levantaron una iglesia dedicada a Santa Marina, en el lugar donde cayera la acémila.
 Esta es la leyenda del castillo y en cuanto al fantasma,  se dice que se puede ver a Dña. Violante de Luna, sobrina del papa Luna quien dejó de ser abadesa de un monasterio de Huesca para defender tenazmente a Loarre de sus enemigos, aunque jamás encontraron su tumba. Por eso algunos días aparece en el "balcón de la reina" vagando por el castillo las noches de luna llena. Claro que no es el único habitante sobrenatural del castillo, según dicen. A veces hay quien ha visto a Don Julian porque su alma atormentada aún vaga por el castillo lamentando el trágico final de su hija. Y en las noches de San Juan visita loarre la "dama mora". Todo esto claro está son sólo leyendas pero muchos visitantes actuales aseguran haber escuchado voces en la cripta de Santa Quiteria del castillo en la que dicen se registran fenómenos paranormales. Se dice también que es alcázar de brujas aragonesas cuyos espíritus permanecen en el castillo en perpetuo aquelarre junto con los Trasgos de la noche.
  Dejando aparte estas historias que han permanecido a lo largo de los años, tengo que decir que el castillo de Loarre es absolutamente maravilloso. Cuando lo visité, me sorprendió lo bien conservado que se encuentra.

  Tiene planta irregular, rodeada por doble muralla y flanqueada por torres cilíndricas. Hay dos puertas para acceder. En una de ellas, podemos observar el relieve de Cristo en actitud de bendecir. Llama la atención el grosor de sus muros, en muchos casos tienen dos metros de ancho. En el interior, vemos la iglesia románica de Santa María sobre la cripta rectangular con ábside semicircular cubierto con bóveda de cañón y decorado al exterior con arquerías ciegas. Las tres naves cuentan con bóveda de cañón, sostenida por columnas cuyos capitales son conocidos por su gran belleza.
  Hay, de hecho, alguna curiosidad en cuanto a los capiteles se refiere. En la Iglesia de San Pedro de Loarre, vemos un capitel con una sirena. Estos seres siempre han estado asociados al número dos porque generalmente se representan con dos peces, representando al Dios de las dos caras. La sirena a la que nos referimos en éste capitel, también sujeta dos peces pero además si nos fijamos bien hay un tercero junto a su cola. El tercer pez, no es un simple adorno ya que convierte a la sirena en el centro de una figura circular o símbolo heliocéntrico que gira de modo similar a un triskele celta. Su melena, está recogida en perfectas trenzas (otra vez el número tres). De la dualidad cristiana medieval al mítico número tres. Teniendo en cuenta que según los bestiarios medievales fantásticos, las sirenas siempre han estado consideradas como imágnes que representan la seducción y el atrapamiento por los placeres carnales, cada uno que saque su propia conclusión.
  No dejéis de ver éste castillo, porque os aseguro que es uno de los más bonitos y mejores conservados que he visto y mirad con atención los capiteles, porque cuentan cantidad de historias fantásticas, religiosas y porque no , misteriosas.