viernes, 23 de julio de 2010

PERATALLADA

   Después de unas largas (y merecidísimas) vacaciones, vuelvo hoy de nuevo con un post sobre uno de los lugares que he descubierto durante mi viaje: Peratallada.  Un pequeño pueblo medieval en la provincia de Gerona que me ha sorprendido gratamente.   Por sus empedrados callejones, a la vuelta de cualquier esquina, parece que te vas a topar con algún caballero medieval a lomos de su caballo.
  Cada uno de los rincones del pueblo es digno de ver.  El castillo data como mínimo del año 1065, aunque se ha comprobado que ya antes existía en este lugar algún tipo de fortaleza.  Las tierras que lo rodean son esponjosas e inundables, pero el castillo está situado sobre una dura roca. Se dice, que cuando exavaban la roca para construír los cimientos, los golpes de pico desperendían unas chispas que quemaban la piel.
  El castillo tiene infinidad de pasadizos ocultos que llegan hasta el bosque con el fin de facilitar el escape a sus habitantes cuando el castillo era atacado.
  Cuenta la leyenda, que en aquellos tiempos, un payés de la zona, iba paseando por el bosque y se encontró una gran losa con una anilla: tiró de ella con fuerza y al abrila pudo adentrarse en uno de los secretos pasadizos. Allí encontró un gran cargamento de habas, y en los tiempos de hambre que corrian, el payés cogió todas las habas que pudo, llenando sus bolsillos. De pronto fue sorprendido por los guardias del castillo, y tuvo que escapar corriendo todo lo rápido que podía, perdiendo todas las habas en su huída. Cuando llegó a su casa sólamente le quedaba una y cual fue su sorpresa al descubrir que era de oro. Al día siguiente, volvió a salir al bosque decidido a encontrar de nuevo la losa con la anilla, que le conducía al pasadizo del castillo y así poder coger unas cuantas más. Pero nunca jamás volvió a encontrar la entrada, ni ninguana otra losa con ninguna anilla de la que tirar.
  Peratallada, fue declarada conjunto histórico artísitco en 1975 por ser uno de los núcleos de arquitectura medieval más importante y mejor conservados de Cataluña.
  A parte del castillo, podemos visitar su iglesia, las torres Norte, Oeste, la del Homenaje, o la de las Horas, llamada así porque alberga el reloj público. No os perdaís las murallas y su plaza de las voltes porticada con arcos, así como su torre de planta circular y el Pont de la Mare de Deu, en el que por cierto, cuelga una cruz paté. No se si antigua o no pero me sorprendió ver una cruz templaria.  En el hueco vacío se supone que existió alguna imagen de la virgen.
  Dar un paseo por éste sorprendente pueblo puede mucho más interesante y misterioso de lo que parece.